Origen de las zanahorias
Se cree que el origen de esta hortaliza está en Irán, pues es allí donde se encuentran la mayoría de sus variedades.
La introducción de las zanahorias en Europa se hizo a través de Andalucía, entre los siglos VIII y X. Pero las zanahorias de color naranja, las más comunes, no aparecieron en Europa hasta el siglo XVII en los Países Bajos.
En un principio el cultivo de las zanahorias se debía más por sus hojas y semillas aromáticas en vez de por su raíz, como ocurre con alguno de sus parientes más cercanos como son el eneldo, perejil o hinojo.
Su color llamativo y su sabor dulce las convierten en una hortaliza que suele gustar a lo más pequeños y a los más mayores.
Propiedades nutricionales de las zanahorias
Las zanahorias debido a su bajo aporte en calorías, alrededor de 40 por cada 100 gramos hace que contengan una cantidad ínfima tanto de grasa como de colesterol.
Uno de los aportes nutricionales más importantes que tienen las zanahorias son los carotenos, beta-carotenos y vitamina A.
El caroteno es capaz de convertirse en vitamina A en el hígado. Por su parte el beta-caroteno se caracteriza por ser una gran antioxidante natural, y gracias a esto, nos ayuda a protegernos de las lesiones que provocan al organismo los radicales libres.
Las raíces de las zanahorias nos proporcionan alrededor del 9% de la vitamina C diaria recomendada, esta vitamina nos ayuda a mantener tanto dientes como encías sanos, y junto con las propiedades antioxidantes que contienen nos protegen de enfermedades, convirtiéndose en unos grandes aliados en las épocas más frías, donde los resfriados abundan.
Tienen también las zanahorias y aporte importante de vitamina B y en especial en algunos grupos de este complejo como son el ácido fólico, muy importante para las mujeres embarazadas ya que evita defectos en el tubo neural.
Otros grupos que nos aporta del complejo de vitamina B que nos aporta son la tiamina, que convierte los carbohidratos en energía y el ácido pantoténico esencial para el crecimiento y el metabolismo.
Algunos de los minerales que nos aportan las zanahorias son, calcio, fósforo, potasio, manganeso y cobre, ayudando en la frecuencia cardiaca y en la presión arterial.
Beneficios saludables de la zanahoria
Gracias a todos sus aportes nutricionales estos son algunos de los beneficios saludables de las zanahorias, y por tanto los motivos principales por los que se deben incluir en nuestra dieta diaria y por supuesto la de nuestros hijos.
Es antioxidante
Gracias a su importante aporte en antioxidantes neutraliza los radicales libres, de esta manera protege las membranas de las células, como consecuencia se convierten en un gran aliado contra el cáncer, enfermedades degenerativas y el envejecimiento.
Fundamental para la vista
Quizás sea de esas frases que nuestras abuelas nos repiten, ¨Come zanahorias, que es muy bueno para la vista¨, y es que gracias a su aporte e beta-caroteno, el organismo lo transforma en retinol.
Además la combinación de un activo de la vitamina A con una sustancia de nuestro organismo como es la opsina, genera la rodopsina, compuesto fundamental para la retina del ojo.
Si tienes problemas oculares como sequedad, fotofobia o ceguera, si padeces disminución de la agudeza visual, o quieres prevenir la formación de cataratas o conjuntivitis, debes consumir zanahorias de manera habitual.
Favorece al corazón
Baja la tensión arterial y ayuda en la eliminación de sustancias tóxicas.
Debido a su aporte en potasio y vitaminas antioxidantes mantiene saludable arterias y vasos sanguíneos.
Protege la piel
Favorece el broncead de la piel gracias a que posibilita la síntesis de la melanina haciendo de filtro natural de los rayos ultravioleta. Y gracias a esto, retrasa el envejecimiento de la piel.
Ayuda a combatir el acné, y en caso de eczemas, quemaduras o laceraiones mejora el estado de la piel.
Si se sufren grietas, forúnculos, pezones agrietados debido a la lactancia, se puede aplicar zanahorias directamente en la piel, ya que calma el dolor, ayudan en la cicatrización, desinfectan y además ayudan a disminuir la inflamación.
Ayuda en la digestión
Es muy beneficiosa para la digestión ya que estimula la producción de jugos gástricos, estimula el movimiento intestinal, favorece en la desaparición del estreñimiento crónico (es mejor tomarla cruda) o la diarrea (en este caso es mejor cocida).
Combate la acidez estomacal y mantiene la flora intestinal. En lo relativo a enfermedades, previene la aparición de cáncer de colon y un gran número de enfermedades infecciosas de origen intestinal.
Para los diabéticos es mejor comerla cruda, en ningún caso cocida.
Acción diurética y depurativa.
Debido al gran aporte en potasio que tiene la zanahoria favorece la actividad de los riñones así como ayuda aumentar la micción, y gracias a eso, se eliminan sustancias tóxicas a través de la orina. Por eso se considera que las zanahorias son un diurético natural.
Las zanahorias son muy recomendadas para quienes tienen cálculos, ya que ayuda a disolverlos y expulsarlos. Limpia las mucosas del estómago, ayuda a eliminar el exceso de ácido úrico.
Mejoran la activdad del hígado y además fluidifican la bilis.
Favorece al aparato inmunológico
Previene infecciones de tipo digestivo y respiratorio ya que es muy buen antiséptico.
Ayuda en la prevención del cáncer.
Gracias a su gran aporte en beta-caroteno previene el cáncer de boca y pulmón, ya que impide el desarrollo de tumores malignos y células cancerígenas.
