Origen del acai
El acai tiene su origen en Brasil, es un fruto silvestre que crecen en palmeras que se encuentran en las zonas selváticas, muy lluviosa y húmeda del norte de Brasil.
Estos frutos han sido durante siglos parte de la dieta habitual de los aborígenes que poblaban estas áreas del país. Pero no sólo se usaba como alimento, sino que también, gracias a sus propiedades, se usaba como medicamento para curar problemas intestinales o padecimientos relacionados con la piel.
Este fruto es pequeño y tiene un color púrpura. Su textura es carnosa, y resulta muy jugosa cuando se come. De la misma manera que el cacao puro, tiene un sabor amargo, y además, este sabor es muy similar al del chocolate. Aunque hay quienes dicen que también se parece a una mezcla de fresas con uvas.
La forma de consumo más habitual es tomarla en zumos, aunque también se puede añadir a los platos como parte de la guarnición.
Propiedades del acai
La composición del acai es muy rica y variada. Por cada cien gramos de acai nos vamos a encontrar con 260mg de calcio, 4,4mg de hierro, 8,1gr de proteínas, 32gr de grasas, 53gr de carbohidratos con alto contenido en fibra. Pero además, también contiene vitamina C y A, ácido aspártico, antocianina, ácidos grasos omega 3 y 6 y otros antioxidantes.
Ácidos grasos omega 3 y 6
Ayudan a desarrollar y fortalecer el sistema nervioso. Y es por este motivo que se recomienda para aquellas personas que están en edad de estudiar, o necesitan mejorar su concentración. También ayudan a reducir los niveles de la hormona del estrés conocida como cortisol. Facilita el sueño reparador y además actúa como relajante muscular.
Beneficios cardiovasculares
El acai contiene grasas monoinsaturadas y fitoesteroles. Su color, muy parecido al de las uvas, se debe a la gran cantidad de antioxidantes que contiene. Así ayuda a mantener una alta calidad en la circulación sanguínea, así como evitando la arterosclerosis (enfermedad provocada por la acumulación de grasas en las arterias).
Alto contenido en fibra
Tiene alrededor de un 40% de contenido en fibras. Esta propiedad ayuda a estabilizar los niveles de azúcar en sangre evitando los picos glucémicos. Además, facilita el proceso digestivo, impulsando la actividad metabólica, ayudando a quemar grasas. Así pues, su consumo nos va a ayudar a mantenernos en un peso adecuado.
Consumir acai diariamente ayuda a prevenir el estreñimiento, regula el tránsito intestinal, y si padeces reflujo gástrico, ayuda a mitigar sus efectos.
Proteínas e hidratos de carbono
Su alto contenido en proteínas lo convierten en un alimento ideal para llevar a cabo actividades físicas como es el deporte.
El valor nutricional de las proteínas del acai es mayor que la del huevo, además contiene mayor cantidad de estas. Así pues, su consumo nos va a ayudar a mejorar nuestro rendimiento, ya sea en el trabajo o haciendo deporte.
Calcio
El acai también es una fuente de calcio. Previene el riesgo de padecer osteoporosis. Su consumo, reduce los dolores relacionados con la menstruación.
Dónde comprar acai
A pesar de su popularidad, aún no es fácil encontrarlo en supermercados o tiendas normales, pero sí lo puedes encontrar en algunas tiendas de alimentación orgánica y también en herbolarios.
Su presentación más habitual es como zumo, polvo, cápsulas o el propio fruto, bayas. Como siempre, lo mejor es comprarlo en su forma natural, y evitar los zumos procesados, ya que estos pueden contener altas dosis de azúcares añadidos y otros elementos.
De la misma manera, que tanto el polvo de acai o las cápsulas no garantizan que contengan el 100% de las propiedades tan beneficiosas de este fruto.