Casi no existe un alimento que al prepararlo no le añadamos algo para potenciar su sabor. La forma más habitual, pero la menos saludable, es añadir sal.
¿Por qué no es saludable la sal?
Pues la razón tiene que ver con la tensión arterial, cuanto más consumo de sal, mayor va a ser la tensión, y esto, con los años puede provocar problemas de salud graves, hipertensión crónica. Como la tensión es algo que se va acumulando con el paso de los años, hasta que no se llega a ciertas edades, es como si no importara la cantidad de sal que se consume.
Pero si no se controla, se puede llegar a una edad adulta, en la que la única solución sea la restricción absoluta de sal en las comidas.
En cualquier caso, hay formas para potenciar el sabor de los alimentos de forma natural, dejando la sal de lado, y aprovechándonos de otros potenciadores saludables que nos ofrece la naturaleza, e incluso de otras formas de cocinar.
Potenciar el sabor de los alimentos
Cebolla, puerro y ajo
Estos vegetales dan un sabor muy especial y diferente a los alimentos a los que se añade. Además, cualquiera de los tres resultan ser muy saludables. Por eso se les suele usar en la cocina como potenciadores de sabor.
Especias
Son innumerables las especias naturales con las que contamos hoy en día, y además resultan muy accesibles. Normalmente, estas se usan en crudo, es decir, se añaden a los alimentos ya cocinados, o se echan encima cuando se ponen al horno, etc. Una forma de sacar buen partido de las especias, potenciando incluso su propio sabor es tostándolas antes de echarlas en cualquiera de los platos que deseemos cocinar.
Una de las especias que mejor pueden sustituir a la sal es la pimienta negra.
Ácidos
Las frutas ácidas, como la lima o el limón son unas acompañantes perfectas para potenciar el sabor de los alimentos. Ambas, la lima como el limón, se suelen utilizar principalmente en el pescado, pero también se puede usar para la carne, eso sí, preferiblemente carnes blancas, como son el pollo o el pavo.
Picantes
La variedad de pincantes es enorme, es más por cada país, suele haber unos picantes particulares. Es un potenciador de sabor que hay que usar con mucha mesura, ya que abusar de él puede provocarnos digestiones difíciles. No se recomienda que los niños coman picantes.
Si abusas de los picantes, además, es probable que mates el sabor de los alimentos, por lo tanto, dejará de tener sentido como potenciador del sabor.
Marinados
Marinar los alimentos les da un sabor completamente muy sabroso. Es otra manera de ganar sabor sin usar la sal, y además, es un método muy saludable.
Vinagres y vinagretas
Es otra forma de ganar sabor sin tener que usa ni sal, ni otro tipo de acompañantes que, además, suelen resultar poco beneficiosos para la salud. Una buena vinagreta, es una forma segura de conseguir un plato exquisito.
Cómo cocinar los alimentos para potenciar su sabor
Y no sólo se trata de añadirles otros alimentos como los mencionados anteriormente, si no que además, dependiendo de cómo cocinemos, lograremos mejorar mucho el sabor. A continuación te contamos las formas de cocinar que más potencian los sabores aprovechando las propiedades de los alimentos.
Plancha o parrilla
Ya sean verduras, carne o pescado, una de las formas mejores para que los alimentos ganen sabor es cocinándolos a la plancha o a la parrilla.
Eso sí, este tipo de cocina suele estar asociado a echar sal por encima. No hace falta, tanto la plancha como la parrilla, sacan el lado más sabroso de los alimentos.
Adobar y macerar
Cuando adobamos alimentos, y se dejan reposar macerándolos, se potencia el sabor muchísimo. Pero no sólo eso, si no que cuando los cocines van a estar más tiernos, y además se va a reducir el tiempo de cocción.
Gratinados
Los alimentos gratinados también ganan muchísimo sabor. Si utilizas queso para gratinar, intenta no abusar mucho de él, pues posee grandes cantidades de grasas. Una alternativa al uso del queso en los gratinados, es la siguiente; Pon un huevo entero más una clara en un bol, y añade un poco de pan rallado sin sal, bátelos muy bien, y añádelo por encima del alimento que vas a cocinar.