Un niño celiaco
Cuando a nuestro hijo le diagnostican enfermedad celiaca se nos plantean muchas preguntas relacionadas con su alimentación: ¿cómo he de cocinar?, ¿qué alimentos puede tomar?, ¿qué alimentos no puede tomar? Y miles de etcéteras. En muchas ocasiones no tenemos dudas en los alimentos en natural el problema se nos plantea con los alimentos elaborados ya que muchos de ellos llevan gluten aunque ni tan siquiera lo pudiéramos imaginar, como los embutidos, las chucherias, los platos precocinados, etc. Los médicos y las asociaciones de celiacos son las mejores fuentes de información en relación con los alimentos y la alimentación de nuestro hijo. Hoy desde aquí queremos ayudaros un poco clarificar y mostrar algunos trucos para que la alimentación de nuestro hijo sea normal, sana y variada.
La enfermedad del celiaco
En primer lugar tenemos que tener muy claro que la enfermedad celiaca es una intolerancia alimentaria permanente al gluten. Y ¿qué es el gluten?, ¿Dónde está presente?. Pues bien el gluten es una proteína que se encuentra en algunos cereales como el trigo, la cebada, el centeno, la avena y la espelta. Por lo tanto debemos eliminar totalmente de la dieta los alimentos que contengan dichos cereales. En principio parece muy sencillo pero debemos tener en cuenta que muchos alimentos elaborados llevan en su elaboración gluten, almidones de estos cereales que contienen gluten o pueden contener trazas de ello. Por lo tanto debemos estar muy alerta y leer detenidamente el contenido de los alimentos que compremos, incluidos los etiquetados como “sin gluten”: embutidos, pastas, meriendas, postres, caramelos, gominolas, elementos de desayuno, etc.
Elaborar dieta para un celiaco
Debido a todo esto debemos de tratar de elaborar una dieta con alimentos naturales, sin manufacturar ya que así evitaremos el posible contenido de almidones de trigo residuales y por tanto de gluten. Este tipo de alimentos son: leche, huevos, carnes, pescado, frutas, verduras, legumbres, hortalizas y cereales sin gluten, es decir, arroz y maíz.
Aunque esto haya quedado claro a la hora de hacer la compra aún pueden quedarnos dudas, ¿qué alimentos no contienen gluten?:
- Leche y derivados: quesos curados y semicurados, requesón, nata, yogures naturales y cuajada.
- Todo tipo de carnes y vísceras frescas, congeladas y en conserva al natural, cecina, jamón serrano y jamón cocido (con el jamón cocido hay que extremar la precaución ya que sólo el de excelente calidad no contiene gluten).
- Pescados frescos y congelados sin rebozar, mariscos frescos, pescados y mariscos en conserva al natural o en aceite
- Huevos.
- Verduras, hortalizas y tubérculos frescos y congelados al natural.
- Purés de patata instantáneos, sin aromas ni sabores.
- Frutas: naturales y en almíbar.
- Arroz, maíz y tapioca así como sus derivados.
- Todo tipo de legumbres.
- Azúcar y miel.
- Aceites, mantequillas y margarinas sin fibra.
- Café en grano o molido, infusiones sin aromas y refrescos de naranja, limón y cola.
- Toda clase de vinos y bebidas espumosas.
- Frutos secos naturales.
- Sal, vinagre de vino, especias en rama, en grano y todas las naturales.
- Encurtidos (cebolletas, pepinillos, aceitunas, etc)
Hay algunos alimentos con lo que debemos extremar la precaución ya que en ocasiones pueden contener gluten y es por ello que debemos leer con detenimiento su etiquetado. Entre estos alimentos están:
- Embutidos: salchichón, chopped, mortadela, chorizo, etc.
- Productos de charcutería: salchichas, morcillas, etc.
- Quesos fundidos, de untar, rallados, especiales para pizzas.
- Patés.
- Conservas de carne: albóndigas, hamburguesas.
- Conservas de pescado: en salsa, con tomate frito.
- Caramelos, gominotas, regaliz y otras golosinas.
- Sucedáneos de café y otras bebidas de máquina.
- Frutos secos tostados y fritos, con y sin sal.
- Algunos tipos de helados.
- Postres lácteos: natillas, postres y cremas de larga duración sin refrigeración.
- Sucedáneos de chocolate, coberturas de chocolate.
- Salsas, condimentos, sazonadores, colorantes alimentarios, cubitos para sopas para realzar el sabor.
En caso de que el etiquetado no nos deje claro si contiene o no gluten es preferible no utilizar dicho producto.
Cocinar para un celiaco
Todas estas normas en ocasiones pueden dejarnos sin recursos a la hora de elaborar una dieta ya que no sabemos con que rebozar o empanar, no sabemos cómo espesar una salsa, etc. En la mayoría de los casos podemos continuar cocinando como hasta ahora lo hemos hecho, sólo tenemos que prestar atención y sustituir los ingredientes que contienen gluten por unos nuevos, por ejemplo:
A la hora de espesar salsas o realizar rebozados utilizaremos maizena, ya que está elaborada con maíz por lo que es apta para el celiaco. Sí es importante que recordemos que no debemos usar para freir la comida de la persona celiaca con el mismo aceite en el que hemos frito rebozados con harinas de trigo. Debemos evitar las contaminaciones con alimentos que contienen gluten
Si queremos empanar podemos sustituir el pan rayado por copos de patata o por almendra molida.
Al cocinar legumbres debemos hacerlo sin chorizo ni morcilla, para sustituirlo podemos usar panceta y huesos de jamón.
Para hacer un sofrito debemos acordarnos de no poner cubitos o pastillas de caldo; para sustituirlo podemos usar caldo natural.
Cuando hagamos paella no debemos utilizar colorante alimentario pero podemos sustituirlo por unas hebras de azafrán.
Si queremos cocinar espaguetis, macarrones, estos han de ser elaborados con harina de arroz y para acompañarles si queremos salsa de tomate, lo más seguro es hacerla nosotros mismos.
En el caso del lomo debemos comprarlo siempre fresco, nunca adobado, pero podemos hacer en casa un adobo con ajo y hierbas frescas como tomillo, romero, laurel, etc.
Cuando queramos unas hamburguesas nunca debemos comprarlas ya elaboradas, pero podemos comprar en la carnicería carne fresca picada (nunca la que ya esta envasada) y hacer unas ricas hamburguesas caseras.
Elaborar el menú en casa bajo nuestra atención es sencillo, pero ¿qué pasa cuando nuestro hijo tiene que comer en el colegio? Y ¿Cuándo asiste al cumpleaños o fiesta de un amigo? En estas situaciones la cosa puede complicarse un poco más pero lo podremos superar con información.
No olvides recordar que tu hijo es celiaco
En el caso del comedor del colegio lo primero que debemos hacer es ponerlo es conocimiento de los responsables del centro y aportar la mayor cantidad de información posible; para ello podemos acudir a una asociación ya que ellos nos darán unas pautas claras para aportar al centro. Se deberá elaborar un menú sin gluten, con el que el niño lleve una alimentación variada y sana y que contribuya a la educación del niño en referencia a la diferenciación de los alimentos que puede y no puede tomar. Es muy importante que el niño tenga claro que alimentos no debe tomar y el por qué. En el caso de que el niño sea muy pequeño los responsables del comedor deberán prestar atención para que los niños no intercambien alimentos.
En el caso de una fiesta con amigos deberemos ponernos en contacto con los padres que lo organizan para que tengan información sobre lo que es la enfermedad celiaca y que alimentos puede y no puede tomar el niño y proponerles alternativas sin gluten al menú de la fiesta e incluso proponernos para llevar algunos alimentos libres de gluten.
Estas son algunas ideas, que podemos aplicar; con el tiempo, la ayuda de asociaciones y profesiones y la experiencia propia iremos normalizando una situación que al principio puede parecernos complicada y conseguiremos que nuestro hijo tenga una excelente salud y alimentación.
