Los grandes protagonistas de las fiestas navideñas son los dulces, presentes en cada momento, dulces típicos como los turrones, polvorones, mazapanes, etc. Y estos dulces también suelen ser el motivo por el cual mucha gente gana unos kilos en estas fechas, se calcula que alrededor de tres a cuatro kilos. Pero dulces navideños y diabetes no es la mejor combinación por estas fechas.
El nivel de la glucosa en la sangre también sube, y esto se debe principalmente a los dulces y a la ingesta de alcohol.
Con este escenario, pueden parecer unas fechas difíciles para aquellos que padecen diabetes, si encima son golosos.
Dulces navideños y Diabetes
A pesar de lo que se suele pensar, los diabéticos, con mucho cuidado y precaución, sí que pueden disfrutar de las comidas navideñas. Su dieta debe estar alejada de alimentos ricos en hidratos de carbono y dulces, pues un exceso en su alimentación de este tipo de alimentos puede tener consecuencias devastadores sobre órganos tan importantes como la vista y el riñón. En todo momento tienen que tener la diabetes controlada, y eso significa tener que prestar más atención a los ingredientes de lo que se come.
El factor para poder controlar la diabetes se encuentra en la compensación de los niveles de glucosa en sangre, es decir en la educación que han ido recibiendo para poder gestionar esos niveles de glucosa, fundamentalmente a través de los tamaños de las raciones que se comen, para poder tener una dieta variada, e incluso comer ciertos dulces como los turrones en Navidad.
La alimentación de un diabético se ve condicionada por los niveles de azúcar, pero por lo demás, debe ser como la alimentación recomendada a todas las personas, es decir, tener una comida variada, sana y equilibrada, con raciones moderadas, sin ningún tipo de grasas saturadas, una ingesta muy moderada de azúcar y de alcohol, y desde luego, la práctica frecuente de ejercicio físico.
Llegados a este punto, podemos decir que si queremos disfrutar de algunos dulces, se puede, pero controlando perfectamente la alimentación, es decir, evitar comer un exceso de hidratos de carbono y de grasas, ya que estos se metabolizan como glucosa en el organismo. De modo que si se hace un menú bajo en grasas e hidratos de carbono, se podrá disfrutar de algún postre navideño. Ensaladas sin ningún tipo de salsa añadida, pescado al horno o carne magra con verduras como guarnición, serán el tipo de comidas más adecuadas para todos, y en especial para quienes padecen diabetes.
Compensar para poder comer dulces navideños
Los diabéticos tienen que aprender a utilizar el sistema de raciones en las comidas para llegar a tener una dieta equilibrada en hidratos de carbono y grasas, por lo que la compensación está relacionada con la equivalencia en raciones de los hidratos de carbono que contienen los alimentos. La Fundación para la Diabetes, proporciona una tabla de equivalencias que puedes ver en este enlace, Tabla de raciones de hidratos de carbono.
De modo que durante las fiestas navideñas, de forma muy puntual y excepcional, los diabéticos, pueden sustituir la equivalencia en raciones de hidratos de carbono por un dulce navideño.
¿Cómo se traduce esto en números?
Una ración equivale a 10 gramos de hidratos de carbono. Por ejemplo, un vaso de 200 gramos de leche desnatada contiene 10 gramos de hidratos de carbono, lo que equivale a 1 ración, y con respecto a los dulces navideños, un polvorón de 30 gramos, contiene dos raciones de hidratos de carbono. Así que si queremos comer un polvorón, deberemos sustituir un alimento que contenga dos raciones de hidratos de carbono por el polvorón.
Edulcorantes y azúcares
A pesar de que en el mercado existen productos que pudieran parecer recomendados para diabéticos, la realidad es que los diabéticos, como hemos comentado anteriormente, deben aprender a compensar la alimentación, eso significa que si todos debemos ser muy conscientes de lo que comemos, en el caso de los diabéticos, aún más.
Los sustitutos del azúcar, en algunos casos de forma explícita, que se muestran como aptos para diabéticos pueden llevar a confusión por los siguientes motivos.
Podemos creer que como están hechos pensando en los diabéticos, se pueden comer sin tener en cuenta la cantidad, y eso no es así, un diabético siempre tiene que tener presente el tamaño de la ración que puede comer.
Por otro lado, etiquetas como sin azúcares añadidos pueden llevar a la confusión, ya que el hecho de no contener azúcar (sacarosa) no quiere decir que no contenga otro tipo de azúcares como es el caso de la fructosa, y potenciadores del sabor que pueden llevar aparejado un incremento de las grasas, que debieran estar restringidas, especialmente en las dietas de los diabéticos.
¿Los edulcorantes artificiales aumentan el nivel de glucosa en sangre?
Es una pregunta que nos debiéramos hacer, y que normalmente y equivocadamente damos por contestada diciendo que no. Sin embargo, dentro de los edulcorantes artificiales, hay un tipo conocido como los polialcoholes que sí que incrementan los niveles de glucosa en sangre, eso sí, en una medida mucho más baja que el azúcar. De modo que sí deben tenerse en consideración a la hora de compensar la alimentación.
Los siguientes edulcorantes artificiales corresponden al grupo de los polialcoholes, Sorbitol (E420), xilitol (E967), Manitol (E421), Maltinol (E965), lactinol (E966) e isomalt(E953).
Por otro lado, existen otros edulcorantes artificiales, denominados como no calóricos, que ni contienen calorías ni aumentan los niveles de glucosa en sangre. Aspartamo (E951), Sacarina (E954), Ciclamato (E952), Acesulfame K (E950) y Sucralosa (E955).
Así que si quieres disfrutar de unas fiestas sin sobresaltos en la alimentación, tienes que aprender a compensar, y por supuesto, el ejercicio físico es otro gran aliado.