Qué es la cetosis infantil
La cetosis infantil es un tipo de mecanismo de defensa que el organismo utiliza cuando las reservas de azúcar se acaban, esto puede suceder debido a un largo periodo de tiempo en ayunas, vómitos causados por alguna enfermedad, etc.
Debido a la necesidad de azúcares que tienen los niños, hasta 4 veces más que los adultos, las reservas de estas son menores, de modo que el organismo decide sustituir la grasa por los azúcares cuando necesita energía. Este proceso lleva a la creación de los cuerpos cetónicos, estos ácidos se eliminan vía orina o vía respiratoria, y tienen un característico olor a fruta madura, este olor es unos de los síntomas que indican que nuestros hijos pueden padecer cetosis infantil. Otros síntomas son un cansancio constante, vómitos, o sequedad en la lengua.
¿Qué son los cuerpos cetónicos?
La presencia en el organismo de cuerpos cetónicos significa que el organismo está utilizando reservas de grasas en vez de glucosa debido a la falta de insulina.
En el caso de la diabetes de tipo 1, estos cuerpos cetónicos se acumulan en la sangre y en la orina debido a que las células no pueden asimilar la glucosa.
La cetosis es frecuente durante la primera infancia, entre los cuatro y cinco años de edad. Se calcula que alrededor del 30% de los niños que son hospitalizados por diabetes presentan síntomas de complicación como, por ejemplo cetoacidosis.
Cuando se hace un diagnóstico demasiado tardío de la diabetes en niños, suele dar lugar a aparición de hiperglucemia con cetosis.
¿Cuáles son los síntomas de la hiperglucemia con cetosis?
Algunos de los síntomas más comunes de la hiperglucemia con cetosis son la necesidad continua de orinar, sobre todo durante la noche, tener sed de forma intensa, perder peso y sensación continua de cansancio.
La cetosis y la diabetes infantil
Con el paso del tiempo este problema, la cetosis deja de ser un problema, ya que la capacidad de aguante de las horas sin ingerir comida por parte de los niños se incrementa, de modo que las carencias de azúcar temporales son mejor toleradas.
En los casos más severos puede llegar a aparecer la diabetes infantil, esta es una de las enfermedades crónicas más frecuentes en la infancia, se debe a que el páncreas no genera la suficiente cantidad de insulina.
Como ante cualquier padecimiento que se crea que pueden padecer nuestros hijos lo mejor que podemos hacer es acudir lo antes posible al pediatra, él os resolverá cualquier duda.
Qué hacer ante la cetosis infantil
Cuando se padece cetosis el objetivo principal es tratar de recuperar las reservas de azúcar cuanto antes mejor.
Como la situación no es fácil y puede llevar a que los pequeños sufran vómitos hay que tener en cuenta varias cosas, entre ellas es preparar un suero casero que evite la deshidratación de los pequeños, este se puede preparar de forma sencilla con agua mineral, azúcar, bicarbonato, un poco de sal y zumo de limón, esta solución ayudará a paliar los vómitos a la vez que mantendrá hidratados a los niños.
Los zumos y bebidas azucaradas, aunque no suelen recomendarse para los más pequeños debios al alto nivel de azúcaress, en este caso ayudarán a recuperar los niveles de azúcar, pero debido a que pueden provocarles vómitos, la mejor solución es que lo tomen en pequeños sorbos.
La mejor dieta que se puede dar al niño cuando los vómitos son frecuentes, es una dieta a base de hidratos de carbono, donde la patata, arroz y pasta sean la base principal. Hay que evitar que el niño/a coma embutidos, comida refrita o carne. Una vez se vaya recuperando, se podrá reintroducir los lácteos poco a poco.
Síntomas de la cetosis infantil
Algunos de los síntomas más comunes de la cetosis son el mal aliento, debido a la producción de amonio por parte del organismo para contrarrestar los niveles de acidosis.
Sensación de debilidad porque el cuerpo no está produciendo el glucógeno muscular necesario.
Mareos y nauseas.
Cómo saber si el niño/a tiene cetosis
Hay una forma bastante sencilla y asequible para poder saber si el niño/a tiene presencia de cuerpos cetónicos en el organismo, y es a través de una solución que se vende en farmacias.
Se trata de unas tiras reactivas que en contacto con la orina durante un par de segundos indicará si hay cuerpos cetónicos en el organismo. Es preferible que la prueba se haga con la orina de la mañana.
El prospecto que viene junto con las tiras reactivas nos indicará, según el color de la reacción, cuáles son los niveles de cuerpos cetónicos en el organismo.
En caso de que el resultado fuera negativo, es importante llevar al pediatra al niño/a para que a partir de otras pruebas se pueda averiguar a qué se deben los síntomas que padece el niño.