¿Qué es la soja?
La soja es una especie de la familia de las leguminosas. El grano de soja y sus subproductos (aceite y harina de soja, principalmente) se utilizan en la alimentación humana y del ganado. Se comercializa en todo el mundo, debido a sus múltiples usos.
Podemos encontrar soja en cacahuetes, guisantes, alubias o lentejas.
En los últimos años se ha extendido su uso en la industria alimentaria orgánica, de modo que su consumo se ha extendido de la misma manera convirtiéndose en más habitual su alergia.
Alergia a la soja en niños
La alergia a la soja es diferente según las personas, algunas personas tienen alergia a un sólo tipo de legumbre, otras sin embargo, tienen alergia a más de una.
Los lactantes y niños son más tendentes a padecer alergia a la soja que los adolescentes y adultos. En cualquier caso la alergia a la soja se puede desarrollar a cualquier edad.
Síntomas de la alergia a la soja
Cuando se ingiere algún producto que contiene soja y se es alérgico, el organismo a través del sistema inmunitario reacciona a las proteínas de la soja, ya que para el sistema inmunitario estas proteínas son invasores nocivos para el organismo.
Las reacciones alérgicas a la soja pueden ser diferentes dependiendo del grado intolerancia, de manera que la misma persona puede tener una reacción diferente en momentos diferentes. Normalmente las reacciones suelen ser leves, mostrándose en la piel, apareciendo ronchas, en otras ocasiones las reacciones pueden ser más graves, llegando incluso a la anafilaxia (reacción inmunitaria generalizada del organismo).
Algunos de los síntomas que aparecen cuando se sufre una reacción alérgica a la soja son los siguientes;
Tos, opresión de garganta, mostrar dificultades para respirar, vómitos, diarrea, dolor de estómago, hinchazón ocular, urticaria, granos o ronchas en la piel, bajada de tensión arterial que puede llegar a provocar mareos e incluso la pérdida de la conciencia.
Tratamiento de la alergia a la soja
Si una persona padece alergia a la soja, la mejor manera para evitar reacciones alérgicas es eliminar completamente de la dieta cualquier alimento que contenga soja. La soja se encuentra en un gran número de alimentos procesados, por lo que es muy importante mirar atentamente las etiquetas de los envases de los alimentos.
Será el médico alergólogo quien a partir de las pruebas que se le hagan al niño o lactante determine el tratamiento que se llevará a cabo.
En caso que se produzca una reacción alérgica es muy importante que se acuda de forma inmediata al hospital e informar que el niño o lactante padece alergia a la soja.
La contaminación cruzada en la soja
La contaminación cruzada ocurre cuando el alérgeno aún no formando parte de los ingredientes de un alimento procesado, ha contaminado al alimento durante su procesado. De modo que una de las formas para identificar esto es comprobar si en las etiquetas de los envases hay alguna información que nos indique que puede contener soja. En caso de duda, no ingerir el producto.
Consejos sobre la alergia a la soja
Cuando se padecen alergias alimentarias lo más importante es que los alimentos que se ingieran sean cocinados en casa, ya que de esta manera nos aseguramos que lo que comemos, en este caso, no contiene ni soja ni trazas de soja.
Si el niño acude al comedor escolar es fundamental que se indique que el niño es alérgico a la soja para que se adapte su menú y así evitar reacciones alérgicos.
Si se va a comer o cenar a restaurantes, es muy importante avisar que se tiene alergia a la soja, ya que así nos podrán indicar si los alimentos contienen soja o contaminación cruzada. Pero cuidado con los restaurantes asiáticos, donde la soja es un productos habitual, ya que en la preparación de la comida, se puede contaminar debido a los utensilios de cocina como son cuchillos, tablas de cortar, etc. Por eso, ante la duda, es mejor evitar ingerir alimentos en un lugar en el que no tengamos todas las garantías.
En algunos casos el pediatra recomendará que el niño lleve encima un auto-inyectable de adrenalina en caso de emergencia, por eso nos aseguramos de que el niño sea capaz de usarlo o quien le puede acompañar.
El uso del auto-inyectable se hará en caso de reacción alérgica grave.
Es muy importante que tanto el médico de cabecera esté informado de la alergia a la soja, y también el farmacéutico, para evitar problemas con algún medicamento.