El dulce es uno de esos sabores preferidos, un sabor que en a la mayoría de las personas les resulta muy placentero. Ya desde la lactancia, cuando los bebés se alimentan de la leche materna, el sabor dulce les produce placer, si no se controla el consumo de dulces, no es difícil padecer adicción al dulce.
Adicción al dulce
Son varios los motivos por los que todas las personas de cualquier edad deseen comer dulces, y cuando lo comen desean comer más. Esto se debe a una liberación de endorfinas y serotonina en el cerebro que producen una sensación de relax, haciendo sentirse bien.
Los azúcares contienen carbohidratos, pero no aportan las proteínas que nuestro organismo necesita. De modo que cuando se comen dulces, debido a estos azúcares se consigue saciar rápidamente el hambre, generando una importante cantidad de energía, pero esto es a corto plazo, ya que pronto se volverá a sentir hambre. Así que esa sensación de bien estar que produce la serotonina y las endorfinas, unido a la sensación de saciado inmediato pero por muy poco tiempo, y la sensación de hambre, convierte a los dulces en un elemento que puede producir fácilmente adicción.
Los dulces y los niños
Resulta bastante normal que los niños coman y quieran comer dulces, ya sean caramelos, chucherías, bollería industrial, chocolate. No se trata de prohibir los dulces a los niños, es más, esto puede resultar contraproducente. Tampoco se deben usar los dulces como recompensa, porque de esa manera los niños asumen de forma inconsciente que los dulces son el premio a un buen comportamiento, y además, como hemos comentado anteriormente, les hacen sentir bien.
Este aprendizaje se lleva hasta la vida adulta, en la cual, cualquier situación que produzca angustia, estrés o ansiedad puede hacer que se refugie en los dulces, lo cual no es nada sano en ningún aspecto.
Son los padres los responsables de controlar el consumo de dulces por parte de los hijos, ya que un consumo en exceso de dulces puede provocar serios problemas de salud en los niños, desde problemas nutricionales, obesidad, sobrepeso, diabetes, aparición de caries, etc.
Síntomas y consecuencias de la adicción al dulce
Algunos de los síntomas más comunes que nos pueden llevar a comprobar que nuestra hija/hijo puede padecer adicción al dulce son los siguientes;
Si comprobamos que no bebe mucha agua y que este lo está sustituyendo en las diferentes comidas por bebidas azucaradas.
Si observamos que cuando come alimentos dulces lo hace de forma compulsiva, y además a lo largo del día come alimentos muy azucarados de forma frecuente.
Si vemos que cuando no come dulce se siente ansioso, con sensación de abstinencia.
Si compruebas que una vez que ha comido el dulce se siente aliviado, le hace sentirse bien.
Las consecuencias de la adicción a los dulces para la salud son bastante graves, es por ello que se deben tomar todas las medidas posibles para acabar con esa adicción.
Algunas de las consecuencias son el considerable aumento del riesgo de desarrollar diabetes, aparición de la caries, problemas de sobrepeso, obesidad y aparición de enfermedades cardiovasculares, aumenta la posibilidad de sufrir infecciones, genera hiperactividad y un importante déficit de atención, debilita el sistema inmunológico.
Cómo tratar la adicción a los dulces
A continuación te mostramos algunas recomendaciones que van a ayudar a superar la adicción al dulce. Pero no hay que olvidar que esta adicción también tiene una fuerte base tanto nutricional como psicológica, por lo que también es importante acudir a un profesional que nos ayude a superarla.
Para poder superar la adicción al dulce hay que llegar a controlar la necesidad que se siente de comer algo dulce.
Restringir el consumo de dulces no comprando ningún tipo de chocolates, helados, bollería industrial, golosinas, chucherías, etc. Si alguien de la familia le apetece comer algo dulce, no tiene que hacer ninguna mención en público del hecho, y deberá ir fuera de casa a comerlo o lejos de los ojos del niño para evitar tentaciones.
Si ves que el niño/niña tiene mucha ansiedad por comer dulce, siempre se puede ofrecer algún tipo de fruta que tenga un sabor especialmente dulce.
Hacer deporte de forma habitual ayuda a eliminar la ansiedad, de forma que le ayudará a superar esos momentos de ansiedad de una forma más natural y sana.
En momentos de ansiedad es importante distraer la atención, por eso salir a pasear puede ayudar a superarla, eso sí, evitando pasar por lugares donde tengan dulce a la vista.
La adicción al dulce es algo de lo que ni los más pequeños ni los más adultos están exentos, así que estas recomendaciones también valen para aquellos adultos que padezcan esta adicción.